- ¿Sí? ¿Por qué?- Le pregunté mientras tomaba del vaso de cerveza que me acababan de entregar.
- ¿Viste que te conté que estaba saliendo con Joaquín?- yo asentí y le hice un gesto con la mano para que prosiguiera- Bueno, es raro, es algo como...-
- ¿Celoso, psicopata, femicida, misógino, machista?-
- No, es raro. Me llama por teléfono para desearme buenas noches, sacó una canción con la guitarra para cantarmela, y me quiere presentar a los viejos!
- ¿Viste que te conté que estaba saliendo con Joaquín?- yo asentí y le hice un gesto con la mano para que prosiguiera- Bueno, es raro, es algo como...-
- ¿Celoso, psicopata, femicida, misógino, machista?-
- No, es raro. Me llama por teléfono para desearme buenas noches, sacó una canción con la guitarra para cantarmela, y me quiere presentar a los viejos!
Me reí con ganas, con una de esas carcajadas sonoras y guturales que hacen que toda la gente cerca nuestro se voltee a mirarnos. Y no pude parar. Mía me miraba del otro lado de la mesa con una ceja levantada, medio esperando que me tranquilice, medio intentando contener la risa.
- Corazón, eso se llama romanticismo- logré decir cuando me calmé un poco.